Farragua; Un plasentino en Gijón

Hoy estamos de enhorabuena, porque nos vamos a disfrutar de un regalo que nos trajeron los reyes este año por ser tan bueno y tan majo. Nos vamos a disfrutar del restaurante gijonés Farragua y a degustar uno de sus menús, en este caso el menú Mangurrino.

El restaurante Farragua, casa de Ricardo Señorán y su equipo, esta situado muy cerca de la plaza Mayor de Gijón, en la Calle Contracay 3, Bajo Izquierda. Ricardo, un extremeño de Plasencia, que tras años de experiencia en numerosos restaurantes, como Diverxo o La Salgar, en 2018 inauguró este pequeño y acogedor rincón extremeño en el corazón de Gijón.

Empecemos por el nombre y en sus propias palabras —«Farragua significa “desaliñado” en extremeño, en castúo. Farragua es algo muy tierno que dicen los abuelos, las madres a los niños. Llegan de la calle mal y les dicen: “Estás hecho un farragua”. Yo de pequeño era muy farragua. Y como soy extremeño, es mi pequeña imprenta aquí. Mangurrio es el menú degustación que tenemos. La mangurria es la parte de arriba de la bellota. Los mangurrinos son los de arriba de Extremadura». 1

Disfrutamos el menú con el maridaje incluido, y empezamos con un vermut, elaborado con vino de pitarra extremeño, es decir un vino sencillo, clásico para el chateo, que tiene su origen en los elaborados de forma familiar en tinajas de barro. Un sabor delicioso. Para empezamos un gazpacho a la antigua y crujientes de oreja. Sabrosísimo y un delicioso sabor a calabaza. Continuamos con un salmón a baja temperatura y cítricos, marinado con un manzanilla. No soy un gran fan de este tipo de vinos, pero la combinación con el sabor graso y suave del salmón y el toque de los cítricos es perfecta. Seguimos con una berenjena sedosa y caldo de carne. Su textura recuerda a un escalope de foie; muy rico, marinado con una sidra de hielo y fuego Olivia de Panizales, excepcional. El siguiente plato sigue navegando por la gastronomía extremeña, con una ensalada hurdana, crujientes de piel de bacalao, puntilla de huevo,… y marinada con un espumoso de bodega Recuero, de las Hurdes; muy rico. Una carne, en este caso, un lomo de corzo con chirivía y frutos rojos, carne marcada y con intenso sabor, marinada con un vino de Recuero de unas viñas arrancadas; fantástico. Nuevamente un pescado, pixín con cítricos marinado con un tinto Antier, y para terminar, una molleja a la parrilla, muy buena, marinada con un vino de vendimia tardía Sigilo Recuero, con ese toque dulce, resulta muy rico. Para finalizar, de postre, limón y queso de cabra verata. Para los amantes del queso de cabra.

Varios menús y una amplia bodega, oferta para disfrute de todos los que se quieran acercarse a conocer la cocina de este «asturmeño». Una persona cercana (inconfundible con su gorro de cocinero), amable, como todo su equipo, y prestándote el mejor servicio. Reconocido por la Guía Michelín y con un sol Repsol, encara el futuro con mucha ilusión y trabajo, agradecido de la acogida de propios y visitantes.

Muchos éxitos y salud para disfrutarlos.

  1. Cocineros de Asturias: Ricardo Farragua – David Remartinez en su blog Remartini – La Comida es un cuento.1 ↩︎


Una respuesta a “Farragua; Un plasentino en Gijón

  1. Ricardo es un tipo majisimo, muy amable y profesional con todo el mundo que lo visita. Siempre me llamó la atención que lleve el gorro de chef, cuando es algo que casi nadie usa ya.

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