Hoy nos acercamos a Laviana para visitar el popular Restaurante Puente La Chalana. Como su propio nombre indica, se encuentra junto al famoso puente de La Chalana, en el prau donde finaliza el descenso folclórico del Nalón.
Llegar es muy sencillo: desde la AS-117, a la altura de Laviana, basta con desviarse en dirección al Puente La Chalana. El restaurante está perfectamente señalizado y cuenta con aparcamiento propio, amplio y cómodo, algo muy de agradecer si se va en fin de semana o con grupo.
El local es amplio, con una terraza al aire libre y otra cubierta, ideales tanto para disfrutar del sol como para refugiarse en los días lluviosos. Su carta, típicamente asturiana, ofrece una buena variedad de entrantes, pescados y carnes, aunque la parrilla es, sin duda, la gran protagonista.








En nuestra visita optamos por compartir varios platos para probar un poco de todo. Empezamos con unas croquetas de calamares y otras de jamón, ambas muy sabrosas. Probamos también un par de criollos, un pastel de cabracho (rico y con buena textura) y un mortero de patatas alioli, perfecto para acompañar.
De segundo, compartimos un cachopo ya cortado en tiras, correcto, con pimiento en el relleno y un rebozado crujiente. Y, como no podía faltar, pedimos un poco de cabritu con patatinos, plato típico de la zona, que estaba realmente delicioso.
Para el postre no quedaba mucho hueco, así que entre varios compartimos una tarta de queso, que puso el toque dulce perfecto a la sobremesa.
Para beber, agua y sidra Foncueva. El precio final, con pan y varios cafés, fue de unos 21 euros por persona, lo cual nos pareció más que razonable para la calidad y cantidad servidas.
En definitiva, Puente La Chalana es una apuesta segura en Laviana: buena comida asturiana, entorno agradable y precios ajustados.
