Hoy nos vamos de sidras al barrio de Montevil y vistamos la sidrería la Tonada. Situada en la calle Ramón Areces 26, junto al instituto de Montevil, esta sidrería hermana de la homónima de la Guía, dispone de una amplia sidrería con comedor y una amplia terraza cubierta, muy agradable para disfrutar del buen tiempo. Amplia carta que podéis consultar en su web, dispone de todos los clásicos de sidrería, con entrantes variados, ensaladas, cachopos, arroces, pescados y mariscos, parrilla y algún plato de cuchara.
En nuestra visita, empezamos con unos huevos rotos con patatas y gambas. Correctos de sabor, pero impresionantemente aceitosos. Me recordaba esos momentos de Pesadilla en la Cocina, en los que el chef Alberto Chicote bascula el plato para ver la balsa de aceite que se forma. Continuamos con unos chipirones la Tonada. El palto es un poco extraño, si bien esta rico, parece una caldereta en la que se mezclan gulas, gambas, patatas y chipirones. El sabor de la salsa es bueno y se podría hacer un rico arroz con ella, pero es excesivo en comparación con el producto servido. Seguimos con una matachana, un criollo y media de costillas. Todo ello rico y correcto, acompañado de patatas fritas. Por ultimo un cachopo tradicional de jamón y queso, correcto de sabor y consistencia.
De postre tan solo una muerte por chocolate y un coulant. Correctos ambos, pero no son caseros, obviamente. Para beber tomamos sidra Trabanco, escanciada por el personal del restaurante y agua. EL precio fue de 20 € por persona. Servicio correcto cocina floja.
La Llingua Llambiona 