Volvemos a una sidrería clásica de Gijón y de las pocas que recuerdo que siguen abiertas desde mi infancia. Se trata de la sidrería Simancas, situada en la Avda. de Pablo Iglesias 57, llegando al cruce con Ramón y Cajal.
Local no muy grande, sin comedor propiamente dicho que este separado de la zona de sidrería y con una pequeña terraza exterior. Su carta es la clásica que podemos encontrar en la mayoría de sidrerías con variedad de entrantes y raciones para compartir, pero donde podemos encontrar algún arroz y gran variedad de pescados y carnes.






En esta visita empezamos por compartir unos ricos calamares frescos, y continuamos con dos clásicos como el hígado encebollado y los callos. El hígado muy rico, bien de pimentón y de cebolla pochada. Los callos muy ricos, una ración abundante acompañados de patatas y con sus tres P´s y lo que a mi mas me importa es que sabían a callos. Totalmente recomendables. Otros pidieron entrecot de ternera al punto, servido con patatas y bastante bueno de sabor.
De postres probamos la tarta de queso y la milhojas, ambas ricas. Para beber disponen de diferentes palos de sidras, nosotros optamos por la gijonesa de llagar J.R. en el Alto Infanzón. Escanciada a buen ritmo y bien atendidos.
Sidrería muy concurrida, así que si queréis conocerla, no dudéis en reservar.